Psico-oncología: El valor del arte en el tratamiento del cáncer
Las personas que realizan arteterapia reciben múltiples beneficios, como dar voz a lo que las palabras no consiguen expresar y encontrar sentido a lo que se está viviendo.
Katherine Curiqueo tiene 22 años y la mayor parte de los últimos cinco meses estuvo hospitalizada, ya que el tratamiento de su leucemia le produjo una baja importante en sus defensas. En ese periodo, ni la televisión, ni el celular, ni su familia lograban distraerla. Hasta que una grata visita pudo eso y más. La arteterapeuta de la Unidad de Medicina Integrativa del Instituto Oncológico FALP, Pamela Oyarzún, llegó con una serie de materiales que llamaron su atención.
Y así Katherine empezó a complementar la quimioterapia con arteterapia, una técnica terapéutica que conjuga aspectos de la psicología y de las artes, otorgando a los pacientes la posibilidad de expresarse mediante materiales artísticos. “Durante la hospitalización, el arte me favoreció para despejarme. Cuando estaba realizando las actividades era como si no estuviese internada, como si estuviese en un lugar mágico y bello. Inconscientemente uno va soltando sentimientos. Gracias a esta terapia logré darme cuenta de que estaba asumiendo la enfermedad muy en silencio para que mi mamá no sufriera tanto. Con la ayuda de la psicóloga he podido crear e interpretar; llorar y contar mis miedos”.
Ahora Katherine sigue en tratamiento mientras espera un trasplante de médula y se incorporó a uno de los dos talleres de arteterapia, que ofrece la Unidad de Medicina Integrativa a sus pacientes no hospitalizados. Allí conoció a Rocío Quiroga, de 25 años, quien ya fue dada de alta de cáncer de tiroides y se acercó nuevamente a FALP buscando una “ocupación mental diferente a lo que puedes encontrar en tu trabajo o con tus amistades. Pertenecer a este grupo me ha ayudado en la transición de ser una ‘enferma de cáncer’ a una persona ‘curada de cáncer’. Son temas que en general uno no conversa con sus pares porque esta enfermedad no es tan común entre jóvenes. El arteterapia ofrece un espacio de confianza y la orientación para expresar a través de una obra lo que estamos viviendo en nuestro interior y así ir sanando realmente, porque la enfermedad no se termina cuando dan el alta. El cáncer deja huellas profundas que hay que sanar”.
El proceso terapéutico
La arteterapeuta Pamela Oyarzún precisa que más allá del resultado que logra el paciente, la relación con un lenguaje alternativo (dibujo, pintura, collage o escultura, entre otras) abre puertas hacia la autoexpresión y la reflexión. Las obras personales vuelven tangibles las percepciones, emociones y el complejo mundo interno subjetivo, junto con ser espejos simbólicos que permiten mirarse, interpretarse y
posiblemente transformarse.
No importa que autor y espectador no coincidan en “ver” lo mismo en la obra, lo que prima es el proceso de intercambio con ella. Es particularmente significativo en el trabajo grupal, en el cual cada uno recibe de la obra un mensaje acorde a sus propias necesidades y experiencias.
En el Instituto Oncológico FALP existen dos grupos que se reúnen una vez por semana para realizar una obra y compartir los mensajes que emanan de ellas.
Actividades gratuitas para pacientes oncológicos Falp
- Yoga
- Terapia de flor estilo Okada.
- Terapia depurativa estilo Okada.
- Arteterapia.
- Taller de Maquillaje.
- Préstamo de turbantes y pelucas.
- Atención psicológica en pacientes hospitalizados.
Más información en: www.falp.cl, dirección: Cano y Aponte 1031, Providencia. Teléfono: 2 2445 7287
Te invitamos a leer el artículo completo en El Mercurio.