La vacuna contra el VPH es una herramienta fundamental para prevenir la infección por las cepas de alto riesgo que pueden causar cáncer cervicouterino y otras enfermedades asociadas.
Actualmente, el Ministerio de Salud administra esta vacuna a niñas y niños de 9 años, ofreciendo protección contra nueve cepas del VPH en una sola dosis. Su aplicación temprana ayuda a generar una respuesta inmune más efectiva, reduciendo significativamente el riesgo de infecciones persistentes en la edad adulta.